Ya desde la ventanilla del avión podrán ver la imagen típica de los campos de arroz, pero no será hasta que les recoja nuestro chófer del aeropuerto y vayan de camino a Hanoi donde vean de primera mano a los campesinos trabajando en la tierra junto a sus gigantescos búfalos de agua.

Hanói es una ciudad con mucho movimiento, a su llegada al hotel y al terminar de realizar el check in podrán pasear por las diferentes calles dedicadas a una artesanía o relajarse en alguno de sus lagos para ver de cerca la vida vietnamita en la gran ciudad del norte y reponer energías antes de su viaje a Hanoi del día siguiente descansando en su hotel.

Tras estar al completo de energía gracias al desayuno y al buen tiempo en Hanoi será el momento de comenzar la visita de la ciudad a través de las calles que no vieron el día anterior. Calles y grandes edificios como el Mausoleo de Ho Chi Minh en su visita por el exterior donde en el interior descansa el héroe nacional que lleva el mismo nombre además de la visita a su casa sobre pilotes.

Héroe de la liberación contra los estadounidenses y los franceses, donde estos últimos dejaron recuerdos como el Palacio Presidencial utilizado actualmente por los vietnamitas. Estos edificios son modernos, hay uno que les llamará mucho la atención al ser el único de este tipo, la Pagoda de Un Pilar cuenta con una bonita leyenda que le encanta a todo el mundo.

No será la única pagoda de Hanoi ya que más adelante podrán ver las bonitas fotos que salen desde el templo Quan Thanh. El templo que lleva como escudo de la ciudad y de la que los vietnamitas están muy orgullosos es la siguiente visita al templo de la Literatura, el cual se convirtió en la primera universidad del país. La excursión a Hanoi no trata solo de ver y contemplar, también degustarán la comida típica de Vietnam con un almuerzo en uno de los restaurantes de la ciudad para continuar con fuerzas esta visita.

Uno de los lugares que más llaman la atención es la antigua cárcel de Hoa Lo, donde fueron los franceses quienes la levantaron y encerraron a todos aquellos que se levantaban en nombre de la independencia para ser más adelante controlada por los vietnamitas en la guerra de Vietnam y encarcelar con los mejores lujos a los soldados que capturaban.

Algunas de las vistas más bonitas y donde van a poder ver la vida local será desde las orillas del lago Hoan Kiem donde todos los días los vietnamitas se reúnen para descansar, hacer ejercicio o tomar un té mientras charlan. También a sus orillas verán el bonito templo Ngoc Son donde a la noche se ilumina su puente rojo haciendo que la magia brille.

La ciudad de Hanoi es muy grande, cuenta con cientos de calles en las que no se pueden perder la vida diaria. Por ello, para explorar mejor la ciudad tomarán un ciclo para dar un paseo por todas estas calles donde al finalizar les estará esperando sus butacas para ver el gran espectáculo de las marionetas sobre el agua. Un show único que solo podrán disfrutar en su viaje a Hanoi.

Tras este día tan completo su hotel de Hanoi les estará esperando para descansar y continuar al día siguiente repletos de energía.

Este día es muy especial porque van a descubrir una escena natural que a todo el mundo deja con la boca abierta en su viaje a Vietnam y Laos. No es nada más y nada menos que una de las siete maravillas naturales del mundo por la UNESCO, y por todos los viajeros que la visitan como el lugar por excelencia que no se pueden perder.

Al dejar Hanoi y avanzar por los campos de arroz, les dejaremos en la costa de la bahía de Halong donde verán que conforme se van acercando van apareciendo más y más montañas. Con hasta más de 1200 montañas de roca caliza que inundan la cosa de la bahía, su crucero les estará esperando para que la tripulación les de la bienvenida con un almuerzo y disfruten de las bonitas vistas.

Además de contemplar la bahía van a poder realizar actividades ya que esconde tesoros como la cueva Sung Sot por ser la cueva mágica. Desde el interior de las montañas hasta el exterior observarán cómo el agua tranquila de la bahía es ideal para darse un baño desde la playa de la isla Titop o subir los más de 400 escalones para tener las mejores vistas de un atardecer donde los viajes de novios encontrarán su momento especial.

Tras la cena a base de mariscos frescos de la bahía a bordo del crucero, continuarán tranquilamente su travesía rodeando las diferentes montañas y para aquellos que quieran probar suerte, practicarán pesca de calamar nocturno siguiendo las técnicas tradicionales.

El tiempo en Ha Long es suave y cálido, donde apetece estar tumbado en la hamaca de la cubierta del crucero antes de pasar la noche a bordo y relajarse en estas vacaciones por Vietnam y Laos.

Nota: La ruta y las visitas que se realizan durante la navegación en la bahía de Ha Long dependen del crucero. Además, están sujetos a cambio debido al tiempo y los niveles de las mareas.

El amanecer es otro momento especial que verán que da gusto de recibir con los primeros rayos del sol que salen entre las montañas y sobran las palabras para contemplarlo sin más. O bien realizando algunas de las técnicas asiáticas para relajarse y liberar estrés practicando Tai Chi en la cubierta del barco para más tarde disfrutar del desayuno.

Una vez relajados y listos esta aventura por la bahía continúa con la visita a otra cueva sorprendente, esta vez será el turno de la cueva Luon donde sirvió como escenario para varias películas y donde los auténticos dueños son los monos que la habitan llegando desde la isla de Cat Ba nadando.

A la vuelta al barco les estará esperando la tripulación para servir el brunch con las mejores recetas de comida vietnamita mientras se dirigen al puerto y tomar el coche para volver a Hanoi. En la capital recordarán estos buenos momentos por la bahía antes de continuar al día siguiente con el salto para realizar turismo en Laos.

Tras el último desayuno en tierras vietnamitas, será el turno del país vecino para continuar las rutas por Laos. Para ello les llevaremos hasta el aeropuerto donde se despedirán de Vietnam y tomarán un vuelo a Vientiane (Laos - continente).

A su llegada verán que estos dos países, Vietnam y Laos, comparten una misma selva y un mismo terreno haciendo que la vida rural sea similar. El chófer les estará esperando en la salida para llevarles hasta su hotel, dejar las maletas y comenzar la visita por esta bonita ciudad que sigue guardando el mismo encanto.

Tras este bonito proyecto, comenzará la visita a los lugares turísticos de Laos donde dejarán un bonito recuerdo del país ya que sus templos son de los más bonitos que veremos por Asia. Bonitos y llamativos a la hora de viajar por Laos ya que algunos de ellos tienen cientos de imágenes de buda como el templo de Wat Sisaket donde los monjes rezan cada día y se asombran al ver occidentales. Los monjes no solo usan los templos de manera religiosa, también son sus casas, sus colegios e incluso sus museos donde podrán ver el arte budista con la visita al templo Wat Ho Phra Keo donde alberga el famoso templo de buda esmeralda como su hermano en Bangkok.

Las vistas desde lo alto siempre son mejores al darnos una vista panorámica de todo un lugar, para ver todos estos templos y la ciudad de Vientiane ascenderemos hasta el monumento Patuxay o Anousavari y ver desde el arco del triunfo las bonitas vistas de todos los lugares visitados en esta ruta a Laos antes de volver al hotel para descansar.

Tras el desayuno hoy van a ver otro bonito acto de solidaridad tras el de ayer con la visita al centro de desarrollo de mujeres discapacitadas donde cada día le ayudan para la integración en la sociedad.

Estos bonitos gestos también se ven con las ofrendas que realizan los vecinos tanto en los centros como en los templos budistas, uno de ellos es muy llamativo al tener un parque de buda. Este parque está repleto de esculturas budistas albergando más de 200 diferentes.

Todas estas visitas y acciones no pueden faltar en sus viajes completos por Indochina donde no faltará el típico almuerzo laosiano con mesas bajas y cojines mientras dan un paseo en barco a través del río Nam Ngum donde las tranquilas aguas nos invitarán a echarnos una relajante siesta para continuar con las visitas del día.

Antes de regresar a la ciudad no pueden perderse por la granja de orquídeas dejando fotos muy bonitas con más de 2000 platas de 300 variedades diferentes, un mundo lleno de colores que les apasionará.

Esta ciudad nos enamorará cuando el sol deje una puesta de sol para enamorados mientras dan un paseo por el río Mekong y disfrutar de Laos por libre con esta tranquila caminata antes de recorrer el mercado nocturno de Chao Anouyong y degustar los platos tradicionales de los puestos callejeros antes de descansar en su hotel.

Tras un fuerte desayuno en el hotel será el turno de despedirnos de la capital para tomar el coche y ver las bonitas escenas de la vida diaria que les dejará la gente y de los bonitos paisajes naturales. Los viajes organizados a Laos están repletos de sorpresas como los diferentes paisajes de los arrozales, los bosques tropicales, los diferentes lagos e incluso de los animales salvajes que se encuentren por el camino.

Será en la siguiente parada, en Vang Vieng, donde les robará el corazón por su imagen rural libre de turistas y donde es especial para descubrir el Laos mochilero. Tras dejar las mochilas y el equipaje en el alojamiento no podrán perderse los sabores de la tierra con un almuerzo en un restaurante local para tener el resto del tiempo libre y pasear por los caminos de madera elevados de las plantaciones de arroz para ver de cerca la vida diaria de la gente.

Paseos por los campos de arroz o en piragua por el río Nam Song y visitar las diferentes aldeas y etnias presentes antes de volver a su hotel en estos viajes culturales a lo más profundo de Vietnam y Laos.

Este viaje a Vietnam y Laos habrán visto que se ven diferentes puntos de la historia, la cultura y la naturaleza de estos países. Para ver las aldeas tradicionales y adentrarnos más en esta cultura tan diferente, tomaremos las bicicletas después de desayunar para llegar hasta una cueva donde podrán practicar un poco de espeleología y visitar un mercado local donde las frutas y alimentos no los habrán visto antes.

Todos estos alimentos son naturales, sacados directamente de la tierra y de granjas orgánicas donde podrán visitarla personalmente y donde tomarán un almuerzo para degustar el auténtico sabor de la comida natural.

Las montañas de la zona esconden cuevas donde incluso dentro de ellas encontraremos imágenes de buda como la cueva Blue Lagoon y pequeñas piscinas naturales donde el agua se vuelve azul turquesa invitándonos a dar un relajante baño antes de volver a la ciudad.

Viajar a Laos por libre les dará estos momentos de relajación tras volver a su alojamiento y seguir disfrutando de la vida local a cientos de kilómetros de su hogar y continuar así al día siguiente con las rutas.

Hoy nos tendremos que despedir de los nuevos amigos que habrán hecho en la aldea para tomar rumbo por carretera hasta otra capital, la antigua capital real Luang Prabang.

Por el camino no abandonarán este paisaje lleno de verde donde la vegetación solo es parada por el asfalto de la carretera y no llega a verse más de un metro de selva. Dentro de esta selva viven aldeas donde realizaremos alguna parada para visitarlas y ver cómo consiguen vivir en estos días tan modernos.

Este sistema montañoso deja vistas preciosas para sus viajes fotográficos a Laos y donde tomarán un almuerzo en base a ingredientes naturales de la zona para ver las vistas panorámicas del valle antes de llegar por la tarde a la ciudad de Luang Prabang.

Otra vista que no podemos perdernos es desde lo alto de la colina Phou Si tras subir sus 328 escalones y disfrutar de la puesta de sol tras las montañas que rodean la ciudad antes de comenzar la ruta gastronómica por el mercado nocturno de la etnia Hmong (residente a lo largo de la frontera de Vietnam y Laos) donde podrán cenar y llevarse bonitos recuerdos hechos a manos por la etnia.

La tranquilidad de la ciudad y los pocos turistas que la visitan hacen que puedan descansar y relajarse antes de volver a su hotel dejando la sensación de vivir entre una gran ciudad y una pequeña aldea al más puro estilo de catai Laos.

Tras un buen desayuno donde estarán cargados de energía, será el momento de coger las bicicletas y dar una vuelta por la ciudad gracias al buen tiempo en Luang Prabang donde es cálido y nos invita a estar en la calle.

La ciudad no solo cuenta con su encantador mercado nocturno, por el día los protagonistas son los diferentes templos y palacios, como el antiguo palacio real donde ahora se ubica el museo nacional y donde verán cómo vivían los antiguos reyes de Laos o cómo rezaban los monjes en el templo real Wat Mai.

El budismo está presente en la vida diaria de los laosianos, así lo verán con los diferentes templos llenos de color oro y que nos dejará asombrados. Estos templos verán que los monjes los cuidan y los preparan como en la visita a Wat Sene, uno de los más impresionantes que veremos o como el de Wat Visoun donde gracias al trabajo de los monjes y los vecinos consiguieron restaurarlo.

Las etnias también están presentes en la vida diaria, la gran diversidad cultural está reunida en un solo lugar, en el centro de artes tradicionales y etnología, contando con historias, leyendas y viendo la diferencias y semejanzas de los diferentes grupos étnicos a lo largo de Vietnam y Laos. Todo este arte y arquitectura visto en casas, guardando la estructura tradicional, en templos y en edificios tiene su propio lugar en la casa del patrimonio para ver cómo tras el paso del tiempo se sigue conservando como si todavía la ciudad viviese en el pasado.

Pero tras las vistas llega el momento de la degustación de los platos especiales de la ciudad donde los degustarán con un almuerzo en el restaurante Khaiphaen realizando una bonita labor con los niños más desfavorecidos de la calle.

Desde la calle, justamente desde Wat Siphouthabath, verán la puesta de sol sobre el río Mekong que bordea a la ciudad y de la selva que nunca nos abandona antes de tener tiempo libre para volver al hotel ya que al día siguiente tendremos que madrugar para ver una escena que no se repite en otro lugar del mundo.

Antes de los primeros rayos de sol la calle se inundará de filas de monjes que salen a pedir limosna y donde los vecinos los esperan sentados en la calle para darles sus mejores alimentos. Esta escena no se repite en otro lugar y podrán verla mientras dan un paseo en tuk tuk por toda la ciudad y los más afortunados podrán ver cómo la fila de monjes se detiene para realizar bendiciones a las familias que les han dado limosna en la llamada Tak Bat. Una vez que los monjes se recojan en sus templos y vean el mercado local donde los habitantes se apresuran en conseguir los alimentos más frescos, será el turno del desayuno antes de dejar la ciudad para ver la naturaleza que esconden estas montañas.

A la salida verán uno de los templos más carismáticos donde tendremos que realizar una parada para ver el arte budista tallado en el templo Wat Xieng Thong y con suerte a los monjes que lo habitan para ver sus rezos. Pero esta salida no la realizaremos en coche, nos ayudaremos por el río Mekong para embarcarnos en un bote y llegar, tras una travesía de unas dos horas donde van a poder ver cómo la selva está presente en todo el terreno, hasta las misteriosas cuevas de Pak Ou. Estas cuevas no son como las anteriores vistas, el budismo está presente incluso aquí, donde a lo largo de todas las cavidades van a encontrar cientos de esculturas diferentes de buda y algunas no se imaginarán dónde las han esculpido.

Tendremos que despedirnos de Pak Ou y estas bonitas vistas entre las montañas para volver en barco hasta la ciudad de Luang Prabang escondida entre la selva y seguir disfrutando de los sabores que nos ofrece con un almuerzo en uno de sus restaurantes. La aventura no termina aquí, hay otro secreto que esconde la ciudad y que explorarán entre las montañas que forman todo este sistema montañoso.

Tras la llegada en coche y a unos pocos pasos, podrán escuchar a lo lejos el caer del agua por las rocas de las montañas y ver la impresionante Kuang Si. Las cataratas Kuang Si nos dejan otra de las imágenes naturales más bonitas al ver cómo el agua clara baja por las rocas hasta terminar en una gran piscina de color azul turquesa donde podrán darse un baño de relax gracias al cálido tiempo en Luang Prabang y disfrutar de las aguas limpias que salen directamente de la roca.

A lo largo del sistema de montañas de la frontera de Vietnam y Laos no solo esconde selva, también animales salvajes y en peligro de extinción. Podrán ver los curiosos osos negros asiáticos en el santuario que los protege, estos pequeños animales son amantes de la escalada y podrán ver cómo se divierten en su parque.

Tendremos que dejar la zona más natural para volver a Luang Prabang y no perdernos una imagen de la vida laosiana que poca gente puede contemplar. La ceremonia BACI es una mezcla de animismo y budismo siendo muy importante sus reuniones para los laosianos y donde verán esta curiosa mezcla antes de tener tiempo libre por la ciudad y volver a su hotel para su descanso tras este día completo.

Tras el desayuno serán los últimos momentos para disfrutar de la bonita ciudad de Luang Prabang y de todas las esencias que nos habrá dejado antes de llevarles hasta el aeropuerto para tomar su vuelo de salida.

El tour de Vietnam y Laos llega a su fin. Tendrán el móvil repleto de fotos que recordarán, anécdotas y curiosidades que estarán deseando de contar y con ganas de volver a esta tierra que no tiene semejantes y desde Viajes Vietnam Asia les estaremos esperando deseando enseñarle lugares únicos.